En el centro de estos esfuerzos se encuentra el compromiso de proteger las especies, restaurar los ecosistemas e integrar la sostenibilidad en todas las facetas del desarrollo nacional. El recorrido de conservación de los Emiratos Árabes Unidos tiene sus raíces en el legado del difunto jeque Zayed bin Sultan Al Nahyan, fundador de los Emiratos Árabes Unidos, cuya visión ambiental pionera continúa guiando el enfoque del país para salvaguardar su patrimonio natural.
Hoy en día, ese legado se está realizando a través de una red nacional de 49 áreas protegidas en tierra y mar, que cubren desiertos, montañas, manglares y arrecifes de coral y representan colectivamente el 18% de las áreas terrestres y el 12% de las áreas marinas de los Emiratos Árabes Unidos. Estos hábitats proporcionan santuarios críticos para algunas de las especies más emblemáticas y amenazadas, como el órix blanco, el dugongo, la tortuga carey y la avutarda hubara africana, algunas de las cuales han sido reintroducidas con éxito.
Estos logros reflejan el impacto de las estrategias nacionales de conservación y de una gestión ambiental a largo plazo.

Entre las intervenciones basadas en la naturaleza más célebres de los Emiratos Árabes Unidos se encuentra su compromiso con la restauración de manglares basada en la ciencia. Estas infraestructuras naturales vitales son más que activos ecológicos, ya que almacenan hasta diez veces más carbono por hectárea que las selvas tropicales. La cobertura de manglares aumentó en el emirato de Abu Dabi en un 92% entre 1987 y 2022, lo que contribuyó a un aumento a nivel nacional del 150% en los últimos 37 años. También hemos estado monitoreando de cerca nuestros manglares a través de estudios de campo regulares y teledetección, con análisis recientes que indican que el 80% de los hábitats de manglares estudiados en Abu Dabi se consideran saludables. Junto con nuestros socios, bajo la Iniciativa para los Manglares de Abu Dabi, hemos ampliado rápidamente la restauración en 3.600 hectáreas, aprovechando tecnologías innovadoras como drones guiados por IA.

El compromiso de los Emiratos Árabes Unidos con la conservación de la biodiversidad se extiende mucho más allá de sus fronteras. La restauración de grandes antílopes en el Chad, por ejemplo, es uno de los programas de reintroducción de grandes mamíferos más ambiciosos del mundo. El regreso del órix blanco, antiguamente extinto en la naturaleza, es una inspiradora historia de éxito. Desde el inicio del programa en 2016, la población de órix blanco en la naturaleza en el Chad ha aumentado constantemente hasta 650 individuos, lo que ha llevado a la UICN a reclasificar la especie como En Peligro. El programa, que se ha ejecutado durante más de una década, es un excelente ejemplo de cómo el liderazgo visionario, el compromiso a largo plazo y las alianzas globales pueden restaurar las especies y revivir los ecosistemas.
Estos logros están impulsados por una colaboración intersectorial. Agencias ambientales federales y locales, incluida la Agencia de Medio Ambiente de Abu Dabi, desempeñan un papel destacado en el liderazgo de los esfuerzos de conservación. Desde hace mucho tiempo, los Emiratos Árabes Unidos tienen una asociación con la UICN y su Comisión para la Supervivencia de las Especies. A través de esta colaboración, los Emiratos Árabes Unidos han producido la Lista Roja de Especies de los Emiratos Árabes Unidos y de Abu Dabi, la Lista Roja de Ecosistemas de Abu Dabi y han identificado 9 Áreas Clave para la Biodiversidad (ACB) en todo el país. Desde 2009, los Emiratos Árabes Unidos también han acogido y apoyado la única oficina de la Convención sobre las Especies Migratorias (CMS) fuera de Bonn, apoyando así la implementación de memorandos de entendimiento sobre aves rapaces migratorias y dugongos. La población de dugongos de los Emiratos Árabes Unidos, estimada en alrededor de 3.500 individuos, principalmente en las aguas de Abu Dabi, es la segunda población más grande a nivel mundial después de Australia. Estos esfuerzos contribuyen significativamente a las bases de datos globales, apoyando la protección de especies a nivel local y global y mejorando la resiliencia de los ecosistemas y la adaptación al clima.

A medida que los Emiratos Árabes Unidos se preparan para acoger el Congreso de la UICN a finales de este año en Abu Dabi, el país está reforzando su papel como puente entre la acción local y el impacto global. Desde el despliegue de la IA y tecnologías satelitales para monitorear especies y restaurar ecosistemas, hasta el empoderamiento de las comunidades para liderar los esfuerzos de conversación, los Emiratos Árabes Unidos están haciendo que la conservación sea parte de la conversación nacional y un pilar clave de su estrategia de desarrollo sostenible.
Más importante aún, los Emiratos Árabes Unidos ven a la naturaleza como un aliado clave para lograr sus objetivos climáticos. La estrategia nacional Cero Neto para 2050, así como el liderazgo del país en la organización de la COP28, subrayan aún más el compromiso de ampliar las soluciones positivas para la naturaleza a nivel regional y mundial. Nuestros esfuerzos pioneros para proteger y restaurar los ecosistemas de carbono azul, incluida la protección de 2.956 kilómetros cuadrados de praderas de pastos marinos y casi 183 kilómetros cuadrados de manglares, proporcionan sumideros de carbono vitales que complementan medidas más amplias de mitigación y adaptación.
El mensaje de los Emiratos Árabes Unidos es claro: proteger y restaurar la naturaleza no es sólo una obligación, sino un imperativo nacional estratégico. A medida que nos enfrentamos a crisis interconectadas, la naturaleza debe estar en el centro de nuestra respuesta colectiva. A través de la innovación, las asociaciones y un propósito claro, los Emiratos Árabes Unidos muestran cómo los países pueden ser líderes en materia de resiliencia de la naturaleza para las personas, el planeta y las generaciones futuras.