La biodiversidad no es suficiente
En las últimas décadas, la comunidad de la conservación ha enfatizado, con razón, la importancia de proteger la biodiversidad, tanto por su valor intrínseco como por su papel clave en el mantenimiento de los servicios ecosistémicos. Sin embargo, esta historia requiere una adición importante: cuanto más cerca esté un ecosistema de su condición natural (es decir, cuanto mayor sea su integridad), más beneficios proporcionará. En términos más técnicos, los ecosistemas que conservan toda o casi toda su biodiversidad, incluidas su composición de especies y estructura de vegetación natural, maximizan muchos servicios ecosistémicos al tiempo que minimizan el riesgo de su pérdida.
¿Por qué es importante la integridad ecosistémica?
Los bosques primarios, por ejemplo, muestran un alto grado de integridad ecosistémica y, en consecuencia, protegen más la biodiversidad y almacenan más carbono que los bosques y plantaciones degradados. Los bosques primarios también son más resistentes a los impactos climáticos, como las sequías, las olas de calor y los incendios forestales. Sus reservas de carbono ecosistémicas también son más estables y tienen un menor riesgo de emitir CO2 a la atmósfera que un bosque degradado. Además, cuanto más cerca esté un ecosistema de su condición natural, más probable será que pueda adaptarse a condiciones climáticas cambiantes.
El poder único de los bosques primarios
La integridad ecológica de los bosques primarios, por ejemplo, está determinada por la compleja red de vida que sostienen. La protección de todos los componentes de esta biodiversidad, incluidas las especies poco comunes y en peligro de extinción junto con los conjuntos únicos de especies, es esencial para mantener los servicios ecosistémicos. En los bosques primarios crecen enormes árboles viejos que crean un microclima interior óptimo, con temperaturas más frías y mayor humedad, para las plantas y animales dependientes del bosque. Estos bosques capturan y almacenan grandes cantidades de carbono y contienen información genética valiosa que ayuda a resistir los factores de estrés ambiental. También generan una gruesa capa de hojarasca y madera muerta que ayuda a las bacterias y hongos a reciclar los nutrientes, protege el suelo de la erosión y contribuye al almacenamiento de carbono.
Por lo tanto, la biodiversidad y la estructura ecosistémica características de un bosque primario, ensambladas gradualmente durante eones, sustentan fundamentalmente la capacidad de estos ecosistemas para ofrecer servicios ecosistémicos superiores. Pero los bosques primarios se pierden muy rápidamente debido a perturbaciones industriales y se recuperan lentamente, si es que alguna recuperación es posible. Su biodiversidad y estructura ecosistémica únicas es lo que los hace insustituibles, y una prioridad tan alta en materia de protección.
Estas características únicas son la razón por la que nosotros y varios colegas redactamos la Moción 015, que se discutirá en el Congreso Mundial de la Naturaleza de la UICN 2025. La moción solicita a la UICN a priorizar la integridad de los ecosistemas en las agendas climáticas y de conservación globales, y a reconocer el papel fundamental que desempeñan los bosques primarios en la salvaguardia de la biodiversidad, la estabilización del clima y la defensa de los derechos de los pueblos indígenas.
Avances en el escenario global
Se logró un progreso significativo en Montreal, y más tarde en Cali, al afirmar la importancia de retener y restaurar la integridad de los ecosistemas en el Marco Mundial de Kunming-Montreal para la Biodiversidad (MMB). En particular, la integridad ecosistémica y la necesidad de maximizar la acción sinérgica se enfatizaron fuertemente en la decisión de Cali sobre el clima y la biodiversidad. Ese fue un gran avance, que también apoya el objetivo de las Naciones Unidas de detener tanto la deforestación como la degradación forestal, como lo señala el Plan Estratégico de las Naciones Unidas para los Bosques 2017-2030, y retomado en la Declaración de Glasgow sobre los Bosques y el Uso de las Tierras en 2021. Sin embargo, se necesita hacer más en el marco de la CMNUCC para reconocer los beneficios de proteger los ecosistemas densos en carbono, como los bosques primarios, en términos de mitigación del cambio climático y adaptación al mismo. Una estrecha colaboración entre el CDB y la CMNUCC es esencial para garantizar que los progresos no se vean obstaculizados por enfoques aislados.